A partir de la pandemia surgieron millones de teorías acerca de cómo cuidarnos. Investigamos un poco más sobre cómo afecta la alimentación en nuestro sistema inmunológico.
Muchos profesionales de la salud nos recuerdan constantemente el fundamental rol que tiene la alimentación en nuestro cuerpo. Como nos alimentamos tiene una consecuencia directa con la prevención y tratamiento de las enfermedades. Lo que comemos, construye nuestro sistema inmune.
Pensemos por ejemplo en el período de gestación, como lo que consume la madre conforma los nutrientes y compuestos que comienzan a construir las defensas del bebé. Incluso ya sabemos lo fundamental que es en el desarrollo de una persona la lactancia. Lo mucho que ayuda a disminuir la incidencia de enfermedades como la diabetes, las alergias o la obesidad en la vida adulta.
Aunque hemos mencionado el período de gestación, debemos mantener una alimentación sana durante todas las etapas de la vida y atender especialmente al consumo de antioxidantes.
¿Pero, qué son los antioxidantes?
Los alimentos de origen vegetal están repletos de antioxidantes. Éstos sirven para contrarrestar la oxidación que tienen nuestras células. Si bien nuestro cuerpo produce sustancias antioxidantes, es necesario que hagamos un aporte extra por medio de lo que consumimos con alimentos que contengan vitamina c y e.
Respecto a lo que nos aconsejan consumir en medio de la pandemia, no hay alimentos preventivos ni curativos, pero sí hay recomendaciones como la de mantener un peso óptimo y llevar una alimentación variada. Algunos de los consejos generales son:
5 raciones de frutas y verduras diarias
Consumir cereales y semillas integrales
Consumir legumbres
En su justa medida, carnes y lácteos
Hidratarnos con agua sin agregados