Para hacer aún más especiales estos espacios podremos convertir estos aromas de aceites esenciales en nuestros mejores aliados que además de aportar a nuestra relajación y a que nuestra casa este agradable.
Los aceites son extracciones de plantas aromáticas y que por ser tan concentrados no se necesitan en grandes cantidades. Veamos algunos de los tantos que hay hoy día en el mercado y que nos pueden gustar:
- Lavanda: tiene un aroma súper fresco y agradable a flores con un toque dulce. A nuestro sistema aporta un efecto calmante sobre todo para las personas que suelen padecer de ansiedad o simplemente para quienes desean tener un espacio propio de concentración. Medicinalmente puede ser utilizado como antinflamatorio o para calmar quemaduras leves.
- Menta: ¿Quién no se duerme divino con un te de menta? Pues un aceite de menta colocado en un difusor en nuestras habitaciones suele ser muy útil para aliviar la congestión, es expectorante, alivia el dolor de cabeza y la migraña, mejora los problemas digestivos y alivia los músculos doloridos.
- Eucalipto: Genera un aroma muy fresco y descogestionante, perfecto para colocarlo en los baños. Sirve para aliviar congestiones nasales, cansancio mental, dolores musculares y cuidados de la piel
- Limón: Su aroma es sumamente estimulante y fresco, el aceite de limón puede ayudar a deshacerte de las malas vibras de tu hogar y aumentar tu concentración.
Cualquiera de estos aceites y otros que puedan gustarte pues hay muchísimos emprendimientos que se están dedicando a elaborar productos naturales, basta con colocarlos en un quemador con una vela o bien con difusores de bambú que funcionan súper bien para generar aromas en nuestros hogares. Contános si ya haz utilizado estos aceites y como te ha ido.
Cuídate
Laura.
