El nivel de incertidumbre que acompaña la situación nos mantiene en un estado ansioso ante la situación desconocida. Estos son nuestros consejos para mantener una buena calidad de vida en estos tiempos de pandemia:

• Mantener los horarios del sueño.
  
  Algunos lo llaman “higiene del sueño”. Mantengamos siempre los mismos horarios para despertarnos y acostarnos. Sumemos al fin del día actividades que nos den calma. Cantar, hacer yoga, pintar mándalas, y lo que a cada quien le genere placer y tranquilidad.

• Alimentarse bien y mantenerse hidratado.
  
  Debemos respetar siempre las 4 comidas (no saltear ninguna), sobre todo el desayuno y la merienda y aprovechar las infusiones. Ahora que hay más tiempo, se puede planificar la semana con recetas que tengan como base muchos vegetales. De esta manera, se come más volumen, pero calorías moderadas. 

• No sobreexponerse a noticias y consultar solamente fuentes confiables (organismos oficiales, instituciones prestigiosas) y en momentos del día establecidos.
  
  Al menos, durante una hora al día intentar hacer algo que te guste: leer, ver una serie, aprender una receta de cocina nueva, hablar por teléfono con un amigo o familiar.

• Quitarse la ropa de pijama para evitar la sensación de discontinuidad y poder organizar los ciclos del día.
  
  El seguir los horarios y vestirse por las mañanas ayuda a tener cierta sensación de control, teniendo una estructura básica diaria.  Las personas somos seres rutinarios, sociales y valoramos la previsibilidad. Verás como cambia tu humor al vestirte con tus prendas preferidas, aunque no salgas de casa.  
• Hacer una rutina periódica de ejercicios en casa, siempre tomando en cuenta que es una situación especial.
  
  Realiza ejercicios de cardio o aeróbicos, hay muchos tutoriales en YouTube de los que puedes sacar ideas para hacerlo en casa sin necesidad de máquinas. Puedes desde saltar la cuerda, hasta bailar con música para mover tu cuerpo. Ahora sí, a comenzar con las series de sentadillas, dominadas, abdominales, planchas, zancadas o lagartijas.  
• Mantener las conexiones sociales a través de medios digitales con sus familiares, amigos y personas de confianza.
  
  Puede mantenerse conectado por correo electrónico, redes sociales, videoconferencia y teléfono. Los vínculos son el gran amortiguador del estrés. La sensación de que estamos juntos en este desafío es siempre tranquilizadora.

• Mantener la higiene.
  
  Es esencial para cuidar la salud, el bienestar y la convivencia. Seguir las pautas de cuidado e higiene personal y del lugar que habitamos sugeridos por las autoridades para evitar el contagio. 

• Ser considerado con uno mismo.
  
  Ser considerado con uno mismo y con sus estados emocionales, teniendo presente que los cambios de rutina tan abruptos, la incertidumbre y la amenaza de la pandemia afecta nuestro estado emocional por más saludables que seamos. Considerar que esto mismo le ocurre a los demás, por lo tanto, intentar ejercitar la tolerancia con nosotros mismos y con los demás.

• Si se tienen hijos o menores cercanos, es importante hablar con ellos. 

Converse sobre la información oficial sobre el coronavirus en un lenguaje adecuado a la edad y de manera honesta. Recuerde que la familia y los afectos observan nuestras emociones y comportamientos.

• Mantener una actitud de gratitud.
  
  La gratitud permite poner el foco en todo lo que sí tenemos, lo que sí podemos y lo que sí recibimos. Descubrir motivos para agradecer y escribirlos, permitirá correr el foco de las “malas noticias”.