Te invitamos a celebrar tus fechas más significativas de una manera diferente:  ¡Con un picnic sustentable!

Un picnic va mucho más allá de un trozo de tela tirado en el suelo con diferentes manjares encima. Más que compartir la comida, compartimos momentos. Si alguna vez has tenido esta experiencia, detente y piensa: ¿Cuál es el mejor recuerdo que tienes? ¿Qué comiste o viviste con tus seres queridos? Y ahí radica uno de los pilares del consumo consciente: la valoración del bienestar, más allá de los bienes de consumo.

Al fin y al cabo, a la hora de organizar un picnic, tenemos que elegir el lugar adecuado, el medio de transporte, qué comprar, qué llevar, cómo llevar, cómo desechar. Y en todas estas etapas, es posible tomar decisiones más sostenibles. Este es el propósito de este artículo: ayudarte a consumir mejor y de una manera diferente, contribuyendo a un mundo más sostenible hoy y en el futuro.

Y ahora, ¿cómo lo haces?

En un picnic siempre podemos tener cambios de última hora: una lluvia repentina que te obliga a cambiar de lugar o esos amigos que te confirman en el último minuto y necesitas aumentar la lista de compras. Pero planificar la ubicación, el transporte y las compras con anticipación te ayudará a aprovechar al máximo el día y evitar el desperdicio.

¿Sabías que cuando no planificamos nuestras compras, tiramos, en promedio, un tercio de los productos perecederos que compramos?

  ¿Como llegar?

Cualquier lugar agradable y seguro es un buen lugar para un picnic ecológico. Puede ser en el parque, en la plaza, en la playa, en un departamento, en la cancha del barrio, en el trabajo o incluso en tu casa.

Si eliges un lugar cercano, es posible que puedas caminar o ir en bicicleta hasta allí

También vale la pena considerar alternativas de transporte público.

Si va en auto, intenta traer más gente. Es más divertido y evitas más coches y emisiónes.

¿Que llevar?

Desde comprar la comida hasta elegir la canasta: ¡todo puede ser más sostenible!

Siempre que sea posible, elige alimentos orgánicos que, además de ser una gran opción para la salud, sean menos dañinos para el medio ambiente.

Priorizar productos de empresas con responsabilidad social y ambiental y saber de dónde proviene lo que más consumes. La carne, por ejemplo, puede provenir de áreas deforestadas. Vale la pena estar atento a sellos, etiquetas, buscar información en internet …

Dar prioridad a los alimentos regionales y de temporada, que tienden a ser más frescos y baratos, y han viajado menos para llegar a ti.

• Si eliges un parque con bebederos, por ejemplo, puedes llevar vasos, frascos o botellas retornables. Por lo que no es necesario comprar agua embotellada.

• Evita los desechables. Si traes vasos y botellas, los retornables son siempre la mejor opción.

¿Cómo llevar todo?

Si tienes una de esas encantadoras cestas, genial. Si no….

Puedes usar una mochila para llevar tus cosas, o incluso una buena bolsa retornable del supermercado o el carrito del supermercado.

¿Cómo terminarlo?

Si la comida se deja en buen estado, puede reconvertirse en un pastel, un dulce o una gelatina. Los restos orgánicos (cáscaras de frutas, restos de comida, servilletas sucias, etc.) van a la basura.

Los desechos orgánicos pueden desecharse de manera responsable así, después de ser procesados, pueden convertirse en fertilizante para árboles en un parque o en una fuente de electricidad en un vertedero. Asique pueden tirarlo en una compostera en vez de un basurero común.

Los residuos secos deben separarse en las cestas correspondientes de cada desecho.