Lo cierto es que esos pequeños pueden ser capaces de destrozar el más elaborado estilismo, pero si logramos elegirlos adecuadamente, serán ellos los encargados de realzar nuestro outfit y hacernos ver más elegantes.

Muchas veces pasa; dedicamos horas a elegir la ropa que nos vamos a poner, pero lo ultimo en lo que pensamos es en los aretes. El error está en tomar los aretes como un complemento secundario.

¿Eso significa que debemos combinar los aretes con el color de nuestra ropa? No necesariamente. Pero sí deben combinar con el estilo de la ropa y adaptarse a la situación de la misma forma en que no vas vestida igual para ir a trabajar cada mañana que para salir de fiesta.

Aretes adecuados a cada situación

Que un determinado tipo de aretes esté de moda no significa que te lo puedas poner en cualquier momento, son perfectos para una noche de fiesta, además los tienes con aires ochenteros, de pedrería, brillantes, vintage… Hazte con algunos, pero no olvides que no son para llevar al gimnasio.

Siguen estando presentes también los aros dorados o plateados, y bien grandes, así como los aretes de plumas, que han dejado su reducto hippy para adaptarse a cualquier estilo.

Los aretes con largos flecos en todos los colores también son un indispensable esta temporada.

Lo importante a la hora de elegir los aretes que te vas a poner es no saturar el look. Si estás loca por estrenar tu nuevo vestido con escote joya, no lo vayas a recargar con unos aretes grandes y brillantes. O si le vas a dar protagonismo a un collar llamativo, elige unos aretes pegados y pequeños que te aporten elegancia.

Aretes adecuados a cada rostro

Una de las cosas que más deberíamos tener en cuenta para elegir los aretes es la forma del rostro. Los rostros ovalados no presentan ninguna complicación porque cualquier tipo de aretes le sienta bien, tan sólo hay que adecuarlos al vestuario y a la situación. En cambio, los rostros cuadrados no son compatibles con los aretes grandes de diseños angulosos. Opta por unos sencillos aros que redondearán tu rostro.

Un rostro con forma de corazón debe evitar los aretes terminados en pico, será mejor elegir unos estrechos que vayan ensanchándose en la parte de abajo para contrastar la forma del rostro. Por su parte, los rostros redondos deben evitar esa misma forma en los aretes. Son más adecuados unos largos y estrechos.

Ten en cuenta también que si eres bajita te favorecen más unos aretes pequeños. En cambio, si eres alta y quieres potenciar tu altura, puedes elegir unos largos.

Estos sencillos trucos pueden ayudarte con la elección de los aretes de cada día. Recuerda dedicarle tanto tiempo y cuidado como al resto del look y seguro que aciertas.