Hay bastantes señales que pueden identificar a una mujer dramática. Si lo eres, probablemente muchas personas a tu alrededor te lo han dicho una que otra vez. No es nuestra culpa salirnos de control cuando el estrés nos ataca, pero realmente serás ¿dramática?
Te molesta que las personas a tu alrededor te hagan cumplidos, lo tomas como si estuvieran burlándose de ti. Además, cualquier comentario que lancen con respecto a ti, te lo tomas muy a pecho. Muchas veces te molestas por cosas que no tienen relevancia y después te arrepientes, pues sabes que sobreactuaste. Estás al pendiente de lo que los demás digan, pues en cualquier momento podrían hablar ti. Si te identificaste con alguno de estos enunciados lamento decirte que puede que seas más dramática de lo que piensas.
Una mujer dramática tendrá a su disposición las mejores armas para hacerse la víctima. Que mejor que las redes sociales para expresar al mundo lo triste, enojada, frustrada y demás problemas existenciales que tiene. Una drama queen adora que las demás personas sepan por lo que está pasando, pues sabe que conseguirá atención inmediatamente.
Los problemas que la mayor parte de las personas consideramos pequeños, tú los haces ver como un enorme problema. Puedes ahogarte en un vaso de agua por la cosa más insignificante. Por esta razón muchas personas evitan estar a tu alrededor cuando pasas por un momento difícil. Lo feo de esto es que en vez de ver el lado positivo o la posible solución solo encuentras espacio para más drama.
El estrés es parte de tu vida, la ansiedad puede hasta nublar tu sano juicio. Eres una de esas chicas que odia participar en cualquier tipo de actividad, pues podrías quedar en ridículo. Ves peligro en cualquier tipo de situación, ya sea salir de tu casa o incluso ponerte el vestido del color incorrecto el lugar erróneo.
Para ti la discreción no esta a discusión. Puedes tener una pelea enfrente de todo un bar sin ningún problema. Es inconsciente, pero una mujer dramática ama estar en este tipo de situaciones, pues al final siempre acaba siendo la “víctima”.
Hablar de mujeres dramáticas es complicado. Muchas veces es un estado pasajero que se va perdiendo al ir madurando. Por lo tanto, si resulta que te identificas con más de una de estas situaciones, no te preocupes, solo debes corregir algunos patrones para que alcances el equilibrio.