Una relación saludable con la suegra es posible

Reza el dicho ” ni tan poco que no alumbre al Santo, ni tanto que lo encandile”¿ lo has escuchado alguna vez? bueno pues hoy lo sacamos a colación pero  relacionado con las suegras.

 

Las formas de mofa que giran en torno a las suegras son múltiples, al parecer son más las expresiones negativas que las positivas si a la suegra nos referimos; pero lo cierto es que no todo es bueno siempre; pero tampoco  todo tiene que ser malo.

La suegra es una parte importante de la vida de tu pareja, y esa es ya una razón de mucho peso para que busques la manera de “llevar la fiesta en paz”; créenos esto traerá más beneficios para tu vida en pareja de lo que imaginas.

 

Eso sí, todo con límites; porque no se trata de ser permisivo para quedar bien; sino más bien de crecer en tolerancia.

 

Te compartimos unos consejos que podrían ayudarte a fortalecer la relación que tienes con tu suegra en lugar de morir en el intento de llevarte con ella y hasta perder tu relación sentimental.

 

  • Antes de cualquier cosa trabaja tus sentimientos en relación con tú suegra: recuerda no importa que sientas hacia ella, será para siempre alguien importante en la vida de tu pareja así que has un esfuerzo por ser empática.

 

  • Esfuérzate en actuar como si te cayera bien: aún cuando fuera una persona muy difícil, enfócate en actuar de forma amable, esto además ayudará a que tu pareja se entere de que estas dispuesta a poner de tu parte para una  buena relación.

 

  • Educación ante todo: no se trata de anular tu derecho a defenderte de posibles ataques que ella haga; sino de ser inteligente emocionalmente.

 

No te des el lujo de criticarla o criticar a tu pareja frente a ella, se ante todo discreta, nunca pierdas los estribos de tal forma que te rebajes de nivel.

 

  • Mira lo bueno que ella hace y elógialo: Enfócate en lo positivo y comunícalo, hazle saber que admiras de ella, o cuán buen trabajo realizó al criar a tu maravillosa pareja, eso la hará sentirse bien y limará asperezas.

 

  • Regálate un espacio para conocerla: Busca conversar con ella, conocer de su vida, que le gusta y que no; sus temores, debilidades y fortalezas; no olvides que ella es una persona igual que tu. Este ejercicio podría sorprenderte de forma muy positiva.

 

  • Hazle algún regalo: esto le permitirá ver que piensas en ella, que cuenta en tu vida y probablemente allanará un poco el camino. Asegúrate de que sea algo que realmente disfrute.

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  • Aclara los malentendidos: No permitas que tu relación se deteriore por suposiciones, se clara, firme y directa  en tus puntos. Nunca de forma grosera.

 

  • No compitas con ella: No te desgastes pretendiendo ser mejor que ella, déjale su espacio y trabaja tus propias habilidades.

 

  • Conversa con tu pareja: coméntale como te sientes, busquen acuerdos cuando de la vida familiar se trata y plantea tus puntos con hechos y de forma serena.

 

  • Se incluyente: aún cuando no te haga feliz visitarla, no dejes de visitarla, no interfieras en la relación madre- hijo de tu pareja. Eso no significa que no puedas poner límite a las visitas pero de forma inteligente, no te expongas a situaciones que no puedes manejar.

Esperamos que estos consejos te ayuden a propiciar una buena y sana relación con tu suegra, recuerda que cualquier esfuerzo que realices vale la pena, sumará paz y armonía a tu núcleo familiar.

¡Inténtalo!

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